El evangelio de cristo y el crecimiento de la iglesia pentecostal
El evangelio ha sido la primera prioridad desde el comienzo del movimiento pentecostal y carismático moderno. La autoimagen histórica en la «historia pentecostal y los carismático» es que fuimos criados por Dios para ser un instrumento de avivamiento y evangelio en el mundo. Tradicionalmente, por lo tanto, se ha sentido que ser pentecostal / carismático es ser un testigo evangelístico. Los pentecostales ven el evangelismo agresivo en las páginas del Nuevo Testamento y debido a nuestra gran consideración por la Biblia y nuestra interpretación literal de las Escrituras, interpretamos la experiencia pentecostal como un mandato para el evangelismo en sus diversas formas y métodos.
Definición de evangelismo
Para los pentecostales, el evangelismo se define como el acto de proclamar las buenas nuevas de Jesucristo en el poder y la unción del Espíritu Santo con la intención de convencer a las personas de que confíen en Cristo para la salvación y lo sirvan en el compañerismo de una iglesia local.
El evangelismo pentecostal rechaza los principios liberales del universalismo que dicen que el trabajo de evangelismo es simplemente informar a las personas que ya están salvadas. Tampoco los pentecostales creen que proclamar solo por dar información objetiva es suficiente. El evangelismo pentecostal involucra las buenas noticias de liberación frente a las malas noticias de que la humanidad está espiritualmente muerta y atada en la opresión del pecado. El evangelismo pentecostal, por lo tanto, llama a una confrontación; es la transmisión de la verdad como encuentro. El testigo pentecostal predica un veredicto y espera resultados.
Este es el sentido en el que Jesús anuncia su misión de evangelismo bajo la unción del Espíritu Santo:
“El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha ungido para predicar buenas noticias a los pobres. Me ha enviado a proclamar la libertad de los prisioneros y recuperar la vista de los ciegos, liberar a los oprimidos, proclamar el año del favor del Señor ” (Lucas 4: 18-19).
Hay una persuasión y agresividad en la evangelización pentecostal caracterizada por la predicación del apóstol Pablo mientras trata de persuadir al rey Agripa para que se haga creyente. Pablo indica que ha sido rescatado para rescatar a otros a través del evangelismo. La comisión de Dios para él es central en su testimonio evangelístico:
“Te rescataré de tu propio pueblo y de los gentiles. Te envío a ellos para que abran sus ojos y los conviertan de la oscuridad a la luz, y del poder de Satanás a Dios, para que puedan recibir el perdón de los pecados y un lugar entre los que están santificados por la fe en mí « (Hechos 26: 17-18).
Evangelismo sobrenatural El evangelismo
pentecostal / carismático implica más que una proclamación verbal. Creemos y hemos experimentado señales milagrosas y maravillas para ser demostraciones de «que el Señor trabaja con ellos y confirma la palabra con las señales que siguen» (Marcos 16:20). Esta fue claramente la estrategia de los primeros cristianos (Romanos 15:19; 1 Corintios 2: 1-5).
Este es el evangelismo que procede de una visión del mundo del poder que conduce al «evangelismo sobrenatural». La curación divina, por ejemplo, ha sido una apertura evangelística que conduce a la proclamación verbal (Hechos 3). Cada curación, milagro, manifestación verdaderamente espiritual, encuentro de poder y exorcismo se convierte en un fervor del reino de Dios y los medios por los cuales el mensaje y el dominio de este reino se actualizan en la vida de las personas que se entregan.
Esta convicción y autoconciencia de que «Dios está entre nosotros y está trabajando con nosotros» es un factor clave en la atracción persuasiva de la adoración pentecostal / carismática. Tanto los intérpretes internos como los observadores externos han acordado que el culto pentecostal es un factor evangelístico clave para el crecimiento de la iglesia pentecostal / carismática. La adoración central a pentecostal / carismática es un estilo único de predicación. Es, según Ray Hughes, «la predicación dotada por el Espíritu, que es penetrante y penetrante». Hughes afirma que hay un «elemento milagroso» presente en la predicación pentecostal, lo que la convierte en una poderosa fuerza evangelística.
El evangelismo sobrenatural también se ha denominado «evangelismo de poder», un concepto articulado por primera vez en la Escuela de Estudios Interculturales del Seminario Teológico Fuller (California, EE. UU.) Y popularizado por John Wimber en su libro Power Evangelism . De acuerdo con Wimber,
Por evangelismo de poder me refiero a una presentación del evangelio que es racional pero que también trasciende lo racional. La explicación del evangelio viene con una demostración del poder de Dios a través de señales y maravillas. El evangelismo de poder es una presentación espontánea, inspirada por el Espíritu, y potenciada del evangelio. El evangelismo de poder es el evangelismo precedido y apuntalado por demostraciones sobrenaturales de la presencia de Dios.
Es esa presencia manifiesta de Dios que se necesita continuamente en nuestras comunidades y en toda la comunión cristiana mundial. Es la promesa y provisión de Dios de proveer avivamiento lo que renueva a los santos y alcanza a los perdidos.
